9. Estereotipos culturales y las pruebas PISA

9. Estereotipos culturales y las pruebas PISA

 

Muchas veces se atribuye esta brecha por sexo a los estereotipos culturales, que influirían tanto en el comportamiento de los propios estudiantes como en las expectativas de padres y profesores. A este respecto, la última entrega de PISA incluía en diez regiones un cuestionario que tenían que rellenar los padres en casa. En él se les preguntaba por los estudios y la profesión que pensaban que elegirían sus hijos. Entre los padres de alumnos varones, un 40% veía a su hijo en uno de los campos STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas, por sus siglas en inglés); entre los de alumnas, solo un 16%.

La explicación feminista al uso es que esto se debe en gran parte a un estereotipo sexista, o a la falta de modelos femeninos en las profesiones científicas. Sin embargo, los datos constatan que la diferencia de resultados entre niños y niñas es aún mayor en los hogares donde la madre trabaja en el campo STEM. Las hijas de estas mujeres obtienen mejores puntuaciones que sus compañeras, pero sus hermanos se benefician aún más. Por otro lado, resulta lógico que los padres vean poco probable que sus hijas acaben estudiando o trabajando en este sector si de media obtienen peores resultados que los chicos.

Otra explicación se centra en la poca confianza en sí mismas de las chicas con respecto a las matemáticas. El informe de la OCDE explica que entre los estudiantes con resultados altos en la prueba de matemáticas y con un nivel de confianza similar, no hay diferencia de puntuación por sexo. Algo parecido pasa con los chicos y la lectura: la brecha por sexo se reduce a algo menos de la mitad entre los alumnos que muestran un nivel similar de interés por leer.

Sin embargo, estos datos no resultan muy significativos. En el caso de las matemáticas, seleccionar el segmento de las alumnas con muy buenos resultados y confiadas en sus capacidades ya deja fuera a la gran mayoría de las chicas. Esto lleva a la pregunta fundamental: ¿por qué los números atraen a tan pocas chicas y la lectura a tan pocos chicos?